Aix-en-Provence, qué ver en la ciudad de Cézanne
Aix-en-Provence es una ciudad universitaria chic y elegante ubicada en la región de Provenza- Alpes en el sur de Francia. La ciudad fue fundada por el cónsul romano Sextius Calvinus en el año 123 a.C y ocupada por muchos grupos étnicos hasta el siglo XII cuando la ciudad alcanza su apogeo. Los restos arquitectónicos del pasado todavía se pueden ver. Hay muchos atractivos para descubrir en esta increíble ciudad. Veamos una lista de las mejores cosas para ver y hacer en Aix-en-Provence.
Centro histórico
El centro histórico de Aix-en-Provence es un lugar hermoso, Recorre sus callecitas empedradas, fuentes, edificios históricos, plazas y muchos bares y restaurantes. Allí podrás ver la Catedral Saint-Sauveur que data su construcción del siglo XII y el Ayuntamiento, construido entre 1655-1678. Durante los fines de semana los lugareños se reúnen a contemplar la arquitectura medieval y tomar café pasando un buen rato. Se realiza un mercado de flores los martes, jueves y sábado. El primer domingo de cada mes se celebra la Feria del Libro Antiguo.
Visita especialmente la Place des Cardeurs y la Place Richelme, ambas muy pintorescas con sus bares y terrazas.
Cours Mirabau
Es la calle más famosa de Aix y está llena de árboles frondosos, fuentes, bares y edificios típicos del sur de Francia Los domingos se realiza un interesante mercado de antigüedades donde se puede encontrar de todo.
Antiguamente era una calle para carruajes tirados por caballos. Actualmente es uno de los lugares más animados y concurridos de la ciudad. Es ideal para tomar un café en una de las cafeterías con terraza y ver cómo la ciudad cobra vida.
Montagne Sainte-Victoire
Se trata de una montaña de pieza caliza con una altura de 1.011 metros. Desde la cima, podrás disfrutar de unas vistas increíbles, igual como fue una inspiración para grandes artistas como Pablo Picasso o Paul Cézanne. Si no eres amante del arte, puedes irte de excursión o participar en una actividad con parapente. El macizo de Saint-Victoire es un destino popular en verano y más de 700.000 personas recorren sus caminos cada año.
Taller Cézanne
Visita la casa del artista francés Cézanne y revive su historia. El famoso artista trabajó en este lugar desde 1902 hasta 1906. Los muebles y diversas obras permanecen intactos y hasta se puede sentir la presencia misma de Cézanne. Es un sentimiento surrealista.
Pabellón de Vendôme
Es un pabellón histórico realizado por el arquitecto francés Pierre Pavillon en el año 1655. Este lugar fue un escondite para el duque de Vendôme, Louis Mercoeur para vivir su relación amorosa secreta. Actualmente es un museo que alberga grandes obras de arte. Tanto la casa como el jardín del Pabellón están catalogados como Monumento Histórico en Francia.
Campamento Des Milles
El Campamento Des Milles se inauguró en septiembre de 1939 para detener a los alemanes y ex austríacos que vivían en Marsella. Más de 3.000 artistas fueron detenidos allí. Posteriormente se usó como campo de tránsito para los prisioneros judíos en el Holocausto. Los prisioneros luego se enviaban al infame campo de Auschwitz, donde se produjeron muchas atrocidades. El sitio es ahora un monumento conmemorativo de la Segunda Guerra Mundial desde 1993 y su objetivo es educar a la gente sobre las cosas que ocurrieron en el recinto y conmemorar a los caídos.
Iglesia de San Juan de Malta
Se trata de una iglesia católica romana que data desde el siglo XIII. Anteriormente era un hospicio, un almacén militar y un lugar de entierro. A pesar de sus múltiples usos, la iglesia se restauró para fines religiosos en el siglo XIX. La iglesia es una mezcla de estilo gótico con pinturas del siglo XVII. Las enormes vidrieras se diseñaron de manera intrincada y cualquiera que las mire quedará asombrado.
Sin duda alguna la ciudad universitaria Aix-en-Provence es conocida por su historia y cultura desde hace miles de años. No esperes más, haz tus maletas, compra tu boleto y descubre esta hermosura de ciudad ubicada al sur de Francia.
