Qué ver en Mallorca: la isla más grande del archipiélago balear

Mallorca es la isla más grande de España y la más poblada de las Islas Baleares. Conforma este archipiélago con las cercanas islas de Ibiza y Formentera. La isla cuenta con largas playas de arenas, hermosas calas, montañas de piedras calizas, senderos para excursionistas, pintorescos paseos costeros, productos fresco y rutas para ciclistas. A continuación hemos recopilado lo mejor para hacer si estás en Mallorca.

Explora el casco histórico de Palma de Mallorca

Palma de Mallorca es una ciudad vibrante, llena de cafés, calles estrechas, tiendas de alta gama, una arquitectura increíble para admirar y una catedral emblemática, la Catedral de Santa María de Palma o llamada comúnmente La Seu.

Debido al calor abrasador en verano, es mejor explorar Palma temprano en la mañana o al final de la tarde cuando el calor es un poco más soportable. Al caer la noche, las plazas cobran vida con muchos restaurantes al aire libre, música en las calles y un ambiente bullicioso.

Admira las vistas desde el Mirador Es Colomer

Vale la pena subir al Mirador Es Colomer para admirar increíbles paisajes y las mejores vistas panorámicas de Mallorca. Desde altos acantilados, vistas infinitas del mar. Debes recorrer un poco para llegar a la cima, y como cualquier otro sitio, debes prepararte para buscar lugares de aparcamiento.

Relájate en la playa de Formentor

Esta playa se encuentra ubicada en el noreste de la isla y debe estar en cualquier lista de viaje cuando se visita Mallorca. Realmente vale la pena. La estrecha y larga playa de arena con aguas cristalinas y poco profundas es el lugar perfecto para pasar en familia disfrutando del sol mallorquí.

Es una playa concurrida, por lo que debes visitarla a última hora de la tarde. Hay duchas, vestuarios, tumbonas para alquilar, restaurante y aparcamiento de pago frente a la playa. Nota: También se puede viajar en barco desde la cercana Pollensa a Formentor por 16 €.

Compra productos frescos en el Mercado de Santa Catalina

Construido en el año 1920, el mercado de Santa Catalina es el más antiguo de Palma y fuente de abastecimiento de cafés, restaurantes y yates.

No es un mercado bullicioso ni está repleto de turistas como otros mercados de Barcelona. Allí podrás encontrar frutas, verduras frescas, carnes, quesos, delicias locales, mariscos, flores y productos horneados. También puedes disfrutar probar platos típicos de tapas en alguno de los bares más populares de la ciudad.

Conoce la belleza del Parque Natural de Mondrago

El Parque Nacional de Mondrago es uno de los mayores atractivos de Mallorca. Se trata de hermosas playas rodeadas de dunas y pinos. A esta playa solo podrás acceder en coche. Hay varias playas como S’amardor, Cala Mondrago y Cala d’en Borgit que se encuentran a poca distancia.

El aparcamiento durante todo el día cuesta 5€ y la playa está a un paso de distancia. Nota: S’Amador tiene una pequeña choza donde se venden bebidas y comidas. En lugar de eso, sugerimos que empaques tu propia comida y bebida para el día.

No te pierdas la fiesta en Malaguf

Si bien Ibiza puede ser la capital de las fiestas de las Islas Baleares, esto no significa que Mallorca no tenga una vida nocturna vibrante. Así que disfruta de tu estadía y visita el famoso Malaguf. En la calle principal, encontrarás aproximadamente 50 bares, variedad de clubes y restaurantes de comida rápida.

Toma una foto de Es Pontas

Al sur de Mallorca podrás ver Es Pontàs, una gran roca natural con forma de puente (o arco) situado en el municipio de Santanyí, entre Cala Santanyí y el Caló des Macs. No podrás resistir a sacar fotos ya que además de ser una extraña formación geológica se encuentra en un hermoso entorno de pinos y acantilados frente al Mar Mediterráneo.

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