Monte de Santa Trega, monumento histórico de Galicia
El Monte de Santa Tecla (Santa Trega en gallego) se encuentra en el municipio de La Guarda, Pontevedra, en la comunidad autónoma de Galicia, España.
Monte de Santa Trega
Santa Trega fue declarado Monumento Histórico Artístico Nacional en 1931 y también está considerado Bien de Interés Cultural.
Desde el alto del monte, se puede disfrutar de unas estupendas vistas del Río Miño (frontera natural entre España y Portugal) de Caminha (pueblo portugués) y del Océano Atlántico.
En la desembocadura del Río Miño se puede observar la isla de A Ilha Ínsua, perteneciente al país luso por su proximidad. En ella vemos una edificación que data del Siglo XV que cumplió la función de convento y luego un siglo más tarde se convirtió en una fortaleza de uso militar.
Si miramos hacia el norte, podremos disfrutar de una preciosa panorámica sobre la costa de La Guarda y el Monte Torroso que da abrigo a la villa marinera.
Una vez hayamos disfrutado de las vistas, volveremos por donde hemos subido para detenernos a contemplar el Castro de Santa Tecla, uno de los castros más conocidos y emblemáticos de Galicia.
Un dato que debéis de tener en cuenta es que la subida al monte no es gratuita. De todas formas, lo que se paga es casi una cantidad simbólica y posiblemente ayude a que todos podamos conocer su historia, gracias a su buena conservación. ¡Ojala más lugares se conservasen igual de bien!
Para acceder a este lugar, a mitad de la subida existe una parada donde se cobra 1 € por persona que permite en la cima visitar el Museo Arqueológico de Santa Trega (MASAT), un lugar diseñado como restaurante en 1931 y que comenzó a funcionar en 1934 , dando lugar al museo en 1953.
Este lugar es un mirador de una belleza natural maravillosa. Al otro lado del sur, tenemos Portugal, allí donde fluye el río Miño, que se puede contemplar su maravillosa boca y Océano Atlántico. Vemos también Caminha y otras localidades a lo largo del curso del río, casi hasta Vila Nova de Cerveira. “Incluso” a los pies “de este monte, se sitúa “La Guarda”, municipio español, donde se comen buenos mariscos.
Castro de Santa Trega
Gracias a la buena conservación de este poblado, nos podemos hacer una idea aproximada de cómo eran y cómo estaban organizadas las casas de esta sociedad.
El Castro de Santa Trega es una aldea amurallada, bastante grande, donde se diferencian perfectamente las calles de las viviendas, ya que estas últimas, aunque no estén enteras, se aprecian claramente. Dos de los castros están restaurados, lo que nos ayuda aún más a imaginarnos la vida de estas sociedades.
En resumen, si tenéis la ocasión de visitar Santa Tecla… no lo dudéis, es un lugar mágico, donde conviven en perfecta armonía: historia, cultura y naturaleza.
Ermita de Santa Trega
Testigo de la historia, se levanta la Ermita de Santa Trega con algunas construcciones en piedra como el Crucero de San Francisco del s. XVI. La ermita del siglo XII se reformó y amplió en los siglos XVI y XVII.