Xcaret es el parque más visitado de la Riviera Maya. A 74 kilómetros de Cancún y a sólo 6 kilómetros al sur de Playa del Carmen, es uno de los grandes atractivos de la Riviera Maya, en la Península de Yucatán en México.
Xcaret es un lugar maravilloso que debe su nombre a a la voz maya que significa “pequeña caleta”. Fue un centro de intercambio comercial relevante de la cultura maya. Hoy es uno de los parques más visitados de la Riviera Maya, no sólo por sus antiguos monumentos sino por el Parque Eco-Arqueológico dedicado a la difusión de la cultura maya y a la preservación del ecosistema.
La mayoría de las construcciones y monumentos que dejó la cultura maya datan de los años 1200 a 1500 D.C. hasta la llegada de los españoles. En el sitio se puede apreciar una iglesia católica, testimonio de que el sitio estaba ocupado a la llegada de la colonización española que cambió la historia del continente.
Pasar un día en Xcaret será una experiencia íntima con la naturaleza pero además te permitirá conocer el mágico y misterioso mundo maya. Combinación perfecta para disfrutar en uno de los rincones más bellos del planeta.
Xcaret, Parque Ecoarqueológico
Visitar este parque no es sólo ver paisajes maravillosos sino entrar a un mundo ecológico dedicado a la investigación y preservación de las especies biológicas de la zona. Es también adentrarse en la cultura maya al recorrer sus vestigios arqueológicos.
El parque se extiende en una superficie de 130 hectáreas de gran atractivo turístico por su flora y fauna y su espectacular paisaje. Puedes vivir experiencias inolvidables como nadar en cenotes, increíbles pozos de aguas turquesas, dejarte llevar por la corriente de un río subterráneo o sumergirte en el hábitat de los delfines.
En el Parque hay también un museo que recrea la vida de los mayas en diferentes maquetas. Podrás visitar un interesante mariposario y tendrás la posibilidad de ver una increíble variedad de aves, jaguares y reptiles como tortugas y cocodrilos.
El parque ofrece la posibilidad de practicar buceo o esnórquel y paseos submarinos en snuba para acercarse a los arrecifes coralinos.
Cuando cae la tarde, se escucha el sonido de los “tunkules”, tambores de madera utilizados por los mayas. Se pueden recorrer grutas y cuevas o detenerse a observar el mítico juego de pelota, deporte que practicaban casi todos los pueblos de Mesoamérica.
Para terminar un día increíble, se puede ir al anfiteatro a ver un espectáculo de danza y música mexicana.