Menorca es una isla apasionante, si está en Europa en el verano entre finales de mayo a principios de octubre no se olvide de colocar a Menorca en su itinerario. Es la isla más tranquila de Las Islas Baleares, posee más de 250 kilómetros de costa con playas vírgenes y salvajes, en mi opinión tiene unas de las más bonitas de Europa. También tiene muchos monumentos prehistóricos. Recomiendo también visitar las encantadoras ciudades de Menorca, Mahón que es la capital y en Ciutadella, visitar sus mercados artesanales y sus puertos.
¿Cómo moverse?
Para visitar la isla, la mejor manera es alquilar un coche o una moto, buscar un mapa y salir explorando y descubriendo sus increíbles calas (playas pequeñas). El transporte público para llegar a las playas es muy limitado, muchos hoteles tienen para ofrecer motos y coches para alquilar.
Nos hemos ido para algunas de las playas más bonitas en varios lugares del mundo y son pocas las playas que se pueden comparar con tanta preciosidad como las de Menorca. Para acceder a muchas de las playas necesitamos no sólo un coche, pero caminar un poco entre los árboles y los pinos para llegar a la playa.
A continuación le contamos un poco más sobre las playas:
Cala Macarella
Cala Macarella, tiene un número máximo de visitantes por día, para ganar la entrada debe llegar temprano. Después de estacionar el coche tiene que caminar un poco, en realidad tiene 2 opciones, aparcar gratis a 2 km de la playa o pagando 5 euros a 300 metros de la playa. Sus aguas cristalinas permiten ver la sombra de los barcos en el fondo del agua, es una sensación increíble poder nadar en estas aguas tan puras y transparentes, lejos de la ciudad, del tránsito, rodeado de naturaleza.
Cala Macarelleta
Cala Macarelleta (nudista, pero nadie te mira mal si vas con ropa), esta pequeña playa está al lado de Cala Macarella, tiene un camino para llegar a esta playa que sale de la caseta de Macarelleta, se encuentra a 10 minutos a pie, no es difícil de llegar y se puede tener las mejores vistas de las playas.
Cala Turqueta
Cala Turqueta es para muchos la más bella cala de Menorca, es una pequeña playa con agua turquesa y arena blanca, rodeada de pinos y dividida en dos partes por rocas. El nombre Turquesa viene del color del agua, que recuerda a la cristalina y azul turquesa.
Cala Galdana
Cala Galdana es una de las calas más visitadas de Menorca, con un ambiente más familiar que otras playas, uno puede encontrar todo lo que pueda necesitar, como tiendas, quioscos, hamacas y bares. Recomendamos ir hasta la parte de arriba de la roca que está rodeando la playa y desde allí se tienen unas vistas increíbles de la playa, también se pueden alquilar barcos por 65 euros 2 horas o 4 horas por 100 euros. Al lado está la playa Mitjana, que es una playa virgen y vale la pena visitar.
Otros puntos para visitar
También puede hacer un paseo por la noche en Ciutadella, la ciudad más grande después de la capital Mahón, tiene un hermoso puerto, perfecto para una buena cena de pescado en un ambiente romántico y animado después de un día en la playa.
Una caminata alrededor de la capital Mahon vale la pena, tiene varios edificios de interés como la iglesia de Santa María. Caminamos por allí hasta perdernos en las pequeñas calles del centro histórico, de allí fuimos a pasear por el puerto de la ciudad que está bien animado de noche.
Para ver la puesta de sol recomendamos ir a Cova d’en Xoroi, es una cueva excavada en la pared de un acantilado con vistas al mar, unas escaleras y pasillos que conectan varias salas y terrazas con impresionantes vistas, lo ideal es llegar temprano para coger un buen lugar para ver la puesta de sol y disfrutar de una noche maravillosa, se paga 12,50 euros con una bebida incluida.
Otro de los lugares en donde fuimos a ver la puesta de sol fue el Faro de Artrutx, es un faro en el borde de las rocas, se encuentra a 7 km de Ciutadella, tiene un bar al lado del faro, donde se puede disfrutar de una inolvidable puesta de sol, beber una cereza para refrescarse.
Menorca ofrece varios tipos de actividades como vela, windsurf, esquí acuático y claro, buceo. El espectacular fondo del mar de Menorca ha sido por décadas uno de los favoritos para los amantes del buceo.
Para aquellos que gustan de caminar tiene pistas como Camino de Caballos que te llevan a través de la naturaleza y al borde de las rocas de la playa o visitar el Monte Toro, la montaña más alta de Menorca, se puede ver casi la totalidad de la isla desde mirador, explorando así cada rincón de ese paraíso.