Qué hacer en Dublín en 3 días: guía paso a paso. Visitar Dublín es sumergirse en una ciudad vibrante, cargada de historia, literatura, música y una vida cultural que atrapa desde el primer paseo. Con tres días tenés el tiempo justo para descubrir sus rincones más emblemáticos, recorrer sus calles llenas de vida y empaparte del ambiente irlandés. Te propongo una guía para saber qué hacer en Dublin, paso a paso para aprovechar al máximo tu estancia en la capital de Irlanda.
Día 1: El corazón cultural de Dublín
Comenzá tu visita por Trinity College, la universidad más prestigiosa del país, famosa por su Biblioteca Antigua y el Book of Kells, un manuscrito medieval iluminado de gran valor histórico. Al salir, caminá por Suffolk Street, donde te encontrarás con el Monumento a Molly Malone, la estatua de la vendedora de pescado que se convirtió en leyenda y símbolo de la ciudad.
Seguí hacia Grafton Street, la calle comercial más famosa de Dublín, llena de tiendas, artistas callejeros y cafeterías donde podés hacer una pausa. Caminar por esta animada calle te llevará a Saint Stephen’s Green, un parque ideal para descansar entre estatuas, jardines y lagos con cisnes.
Tarde de museos. Comienza con arte en la Galería Nacional de Irlanda, que reúne una colección impresionante de obras europeas e irlandesas. Luego, visitá el Museo Nacional de Irlanda, con vestigios arqueológicos de la edad del bronce, de la era de los vikingos y objetos egipcios.
Para terminar el día, acercate al Merrion Square, un parque rodeado de casas georgianas y con la estatua de Oscar Wilde, uno de los grandes escritores irlandeses.
Día 2: Historia y monumentos
Hoy visitamos las dos catedrales de la ciudad. Comenzamos por la Catedral de San Patricio, vinculada al santo patrón de Irlanda. Luego vamos a visitar la Christ Church Cathedral o Catedral de la Santísima Trinidad, donde podés bajar a su cripta medieval.
Junto a esta última se encuentra Dublinia, un museo interactivo que revive la época vikinga y medieval de la ciudad. Desde allí podés llegar a pie hasta el tranquilo St. Audoen’s Park, un espacio verde con restos de la muralla medieval.
Por la tarde, explorá el Castillo de Dublín y el cercano Ayuntamiento, dos edificios clave en la historia política de Irlanda. Y si todavía tenés energía, acercate a George’s Street Arcade, un mercado cubierto del siglo XIX con tiendas vintage, puestos de artesanía y buena comida local.
Día 3: El Dublín más animado y su relación con el mar
El último día lo podés dedicar a conocer el lado más popular y animado de la ciudad. Por la mañana, recorré el barrio de Temple Bar, al borde del río. Es famoso por su ambiente bohemio, galerías de arte y pubs tradicionales donde la música en vivo nunca falta.
Luego acercate al río Liffey para visitar el Gran velero Jeanie Johnston, réplica de un barco del siglo XIX que trasladó emigrantes durante la Gran Hambruna. En su interior funciona el Museo de la Gran Hambruna, que narra este duro episodio de la historia irlandesa.
Antes de despedirte, cruzá el moderno puente de Calatrava (Samuel Beckett Bridge), una de las obras de arquitectura contemporánea más icónicas de la ciudad.
Consejos para tu viaje
- Dublín es una ciudad que se disfruta caminando, pero también podés usar el tranvía (LUAS) o buses para los trayectos más largos.
- Reservá con antelación la visita a Trinity College y al Jeanie Johnston, ya que son muy demandados.
- No dejes de probar una Guinness en un pub tradicional, preferiblemente con música en vivo.
Esta guía «Qué hacer en Dublín en tres días» te permiten vivir su esencia: desde la historia medieval hasta su energía cultural actual, pasando por parques encantadores, museos, mercados y pubs que laten al ritmo de Irlanda. Una ciudad que, sin duda, invita a volver.