Estadio Centenario de Montevideo

Estadio Centenario de Montevideo, monumento histórico del fútbol

El Estadio Centenario de Montevideo, monumento histórico del fútbol, es una visita obligada si eres aficionado al fútbol y estás paseando por Uruguay. No es el estadio más moderno del mundo ni el más caro pero tiene mucha historia. En este estadio fueron escritos capítulos importantes de la historia del fútbol. Ya al entrar, sentirá que en Uruguay el fútbol se juega con garra, alma y sudor en la camiseta. Bienvenidos al templo del fútbol de Montevideo, la capital uruguaya.

La primera de todas las Copas del Mundo

El Estadio Centenario de Montevideo fue construido para la Copa Mundial de 1930, la primera en la historia. La inversión fue millonaria. El secretario de la FIFA llegó a admitir, en una entrevista al final del evento, que “no creo que ningún otro país se postularía a organizar un evento tan caro como fue esa Copa del Mundo”.

La idea inicial era que todos los partidos fueran realizados en el Estadio Centenario. Pero el destino trajo las lluvias de junio y el estadio no fue concluido a tiempo. Las 13 selecciones dividieron sus juegos entre dos estadios más pequeños en la ciudad. De los 18 partidos, sólo 10 fueron en el Centenario. Brasil fue sorprendido por el frío y fue eliminado en la primera fase.

El Estadio Centenario de Montevideo tuvo su debut con un partido Uruguay 1: 0 Perú. Uruguay siguió su camino, hasta llegar a la primera final de la historia de los mundiales. El adversario era la favorita Argentina. El Estadio Centenario de Montevideo, construido para 65 mil personas, aquel día recibió más de 93000 aficionados.

El primer tiempo vio a los uruguayos abrir el marcador y los argentinos empataron y voltearon el juego. En el segundo tiempo, la milagrosa recuperación de Uruguay cerró el partido con un increíble Uruguay 4 Argentina 2 . La sorpresa fue general para los aficionados y los reporteros. Nació en ese momento la magia del fútbol. El encanto de las Copas del Mundo hace que cada equipo entre al campo de juego creyendo que puede ser campeón. Era el pequeño Uruguay, dueño de todo el mundo.

Mi visita al Estadio Centenario de Montevideo

Llegué por la mañana temprano. Di una vuelta en el césped que rodea el estadio hasta encontrar la puerta de acceso de los visitantes. En un mostrador, una muchacha me recibió y cobró el ingreso, que da derecho a visitar el Estadio Centenario de Montevideo y el Museo del Fútbol. Entré primero al Estadio. La construcción parece que no ha cambiado mucho, desde 1930 hasta ahora. El estadio es simple, un esqueleto de concreto que en nada recuerda las modernidades de las arenas actuales. Un estadio raíz. Un estadio con alma.

Las sillas azules tiñen las gradas con el color celeste de la selección dueña de casa. El estadio vacío hacía la visita aún más especial. Fue como tener un templo de fútbol para mí. Pude subir, bajar las gradas y conversar con Rafa sobre las particularidades de la construcción y sobre las jugadas de aquella final histórica.

El Estadio Centenario es el único estadio en el mundo que fue declarado por la FIFA como monumento histórico del fútbol mundial y es una pena que esté casi olvidado por el tiempo y lejos de la atención de los visitantes y amantes del deporte.

Estadio Centenario de Montevideo y Museo del Fútbol

Horario: lunes a viernes de 10h a 17h.

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